Prevención de infecciones respiratorias

¿Cómo prevenir enfermedades en invierno? Es una de las preguntas más frecuentes y la respuesta es muy simple.

Con pequeñas acciones como desinfectar nuestra área de trabajo y hogar; lavarnos las manos frecuentemente y cubrirnos la boca cuando salimos a la calle, se puede reducir el riesgo de contraer alguna infección.

De acuerdo con diversos médicos es básico que si estamos en lugares cerrados, nos cubramos con una bufanda, chamarra o mano nuestra boca, porque nuestro sistema de defensa natural que tenemos en la nariz -y que está formado por los vellitos y la mucosa nasal-, se congela, lo cual no permite que funcione correctamente.

Cuando esto ocurre no se puede controlar el paso de microbios, ni calentar el aire para que llegue a los pulmones a la temperatura adecuada, por lo que esta acción es determinante para prevenir enfermedades en invierno.

Otros consejos básicos que podemos mencionar son los siguientes:

Evitar la automedicación. Siempre acudir con un profesional de la salud para que pueda determinar que es lo mejor para nuestro caso.

Ingerir frutas y verduras ricas en vitamina A y C, para fortalecer el sistema inmunológico. Algunas frutas que se recomiendan son las naranjas , toronjas, fresas, kiwi y moras. En cuanto a las verduras, se recomiendan los pimientos, espinacas , coles de bruselas , berros, acelgas, entre otras. En general ,se recomienda optar por una alimentación más sana y equilibrada.

Lavarse las manos con frecuencia, en especial después de tener algún contacto con personas enfermas. Puedes llevar siempre contigo un gel antibacterial o toallitas húmedas.

Evitar acudir a sitios concurridos si se tienen síntomas de alguna enfermedad respiratoria. Esto podría ocasionar que termines contagiándote o contagiando a otras personas.

Descansar lo suficiente durante las noches y tomar abundantes líquidos, en especial agua natural.

Al salir al exterior, cubrirse bien el cuello y pecho. Esto para evitar un cambio muy brusco de temperatura.

Hacer ejercicio regularmente. Hacer una actividad física regularmente refuerza el sistema inmunitario y también presenta la ventaja de combatir el estrés.

Ventilar los ambientes. Se aconseja abrir las puertas y ventanas de la casa para favorecer la circulación el aire, porque el estancamiento de éste favorece la proliferación de gérmenes.

Evitar el contacto con el rostro. Para sonarse la nariz o frotarse los ojos siempre deben tenerse las manos limpias y usar pañuelos, ya que son los principales puntos de ingreso de virus y microbios.

El cuerpo limpio. Es necesario bañarse por la tarde y jamás acostarse con el cabello húmedo. Un cuerpo limpio evita la manutención de virus que, tal vez, estén en nuestro cuerpo pero aún no han ingresado en él.

Evitar el estrés. Al aumentar los niveles de estrés, las defensas bajan y el cuerpo se vuelve más propenso a enfermarse.

Vacunas. No olvides vacunarte contra las enfermedades más comunes durante la época invernal, como la AH1N1 y otras.